Tal vez por esta tendencia a una excesiva responsabilidad, opto por cometer sincericidio. Siempre funciona. He parado un huracán así. Detrás del miedo a que todo se derrumbe, hay una historia nueva, más clara, más luminosa. Y en medio de la escena estoy yo, recién nacida, lista para seguir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario